■ Joaquín Nieto (OIT): Es necesario resolver los problemas de empleo con cambios en las políticas económicas para mejorar la situación de millones de trabajadores.
■ Esther Lynch (CES): Ante los profundos cambios en el mundo del trabajo, debemos reflexionar sobre la dimensión ética, dando prioridad al ser humano.
■ Lola Contreras (Barrios ignorados): Existe una catástrofe humanitaria silenciada de fracaso escolar, paro, pobreza y exclusión de miles de personas y de familias enteras.
Durante esta jornada de trabajo, los delegados y las delegadas han compartido su mirada en torno a la situación del empleo en todo el mundo, según la realidad que viven los trabajadores en cada una de las zonas con implantación de militantes y movimientos del MMTC.
La primera aportación a esta mirada ha sido por parte de Joaquín Nieto, director de la Oficina de la OIT en España, que aboga por “una gestión justa y participada de la transición del presente al futuro del trabajo”, para resolver las grandes amenazas que pesan sobre la sociedad mundial, en la que las organizaciones de inspiración cristiana y la misma Iglesia tiene mucho que aportar, como promotoras de la “justicia social”. En su intervención ha señalado la necesidad de “una sociedad consciente y activa que exija a los gobiernos que cumplan los compromisos de justicia social que han firmado, los Objetivos de Desarrollo Sostenible”. En está línea Nieto, considera que “hace falta un nuevo impulso de las organizaciones del trabajo, las organizaciones empresariales, para que sean representativas del conjunto, pero también nuevas reglas nacionales e internacionales y nuevas políticas”.
El reto es responder a los 200 millones de parados que hay en el mundo, a los 40 millones de jóvenes que cada año acceden al mercado de trabajo y los millones de personas que no tienen un trabajo digno, como quienes tienen un contrato sin derechos y protección social, tienen trabajo esclavo, o están atrapados en el trabajo infantil. “La humanidad no se puede permitir prescindir de millones y millones de jóvenes en edad de trabajar que no encuentran un empleo digno”.
Por su parte, la irlandesa Esther Lynch, secretaria ejecutiva de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) -a la que pertenece CCOO, UGT, USO, entre otros-, ha denunciado que en Europa se están sacrificando las condiciones de vida y de trabajo “por una visión extremadamente economicista, poniendo en marcha medidas que afectan a muchas personas, sobre todo, a las más personas más frágiles y más vulnerables”. La CES está empeñada en “promover políticas respeten los derechos de los trabajadores, que extiendan la igualdad y la solidaridad para que los derechos del trabajo sea la columna vertebral que sostengan los derechos sociales con una fuerza capaz de contrarrestar la deriva economicista y financiera”, dijo. Ante esta situación, ha planteado “la necesidad de desarrollar una dimensión ética para Europa: Este mundo hacia el que estamos evolucionando es un mundo en el que la robotización va a tomar más parte y debemos reflexionar sobre la dimensión ética, dando prioridad al ser humano y no a las máquinas. Estamos en un mundo de trabajo donde hay cada vez más autónomos. Hoy cada vez más se fuerza a las personas a hacerlo por su cuenta. La CES piensa que cada vez hay que promocionar la realidad de empleado, de trabajador. No podemos tener una mala protección para los autónomos y otra para los empleados. Esto intentamos llevarlo a cabo con las instituciones europeas”. Finalmente, Lynch ha invitado al MMTC al seminario sobre el trabajo decente organizado por la CES, el próximo 22 de septiembre.
En la intervención de Lola Contreras, del movimiento popular Barrios Ignorados de Andalucía, ha exigido “planes integrales comunitarios participados por los vecinos para que las administraciones no sigan gastando partidas económicas por gastar, que no consiguen reducir la pobreza y la exclusión en nuestros barrios”. En ellos se vive “una verdadera catástrofe humanitaria, ocultada y silenciada intencionadamente, fruto también de un diseño de ciudad” que invisibiliza este problema de fracaso escolar, paro, pobreza y exclusión para miles de personas y para familias enteras. Contreras apunta la necesidad de “recuperar la identidad de barrios y su dimensión comunitaria”. En este sentido, desde Barrios Ignorados se ha “diseñado un proceso de acompañamiento de las familias, con un itinerario formativo familiar de inclusión“ que favorezca la atención real a las personas y a las familias.
AGENDA DE TRABAJO. Lunes, 17 de julio 2017.
09:15h. Ponencia. El pensamiento del papa Francisco en relación al trabajo decente. Interviene Antonio Algora, obispo emérito y responsable de la Pastoral Obrera de la Conferencia Episcopal Española.
11:15h. Panel. Presentación de la historia del Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos. 50 años de compromiso en la evangelización del mundo del trabajo. Intervención de Basilisa López, doctora en Historia Contemporánea. Testimonios de Asia, América y África. Retos y desafíos.
16:00h. Grupos de trabajo.
18:00h. Pleno de conclusiones.