La globalización es la fase álgida de la internacionalización. El proceso de intercambio entre países, que ha marcado el desarrollo del capitalismo desde la época mercantil de los siglos XVII y XVIII, se amplió con la industrialización, adquirió nuevas bases con la gran industria a fines del siglo XIX, y hoy adquiere más intensidad, más amplitud y nuevas funcionalidades. El mundo entero está involucrado en todo tipo de intercambios: técnicos, comerciales, financieros, culturales. Vivimos un nuevo período en la historia de la humanidad.
La base de esta verdadera revolución es el progreso técnico, obtenido como resultado del desarrollo científico y basado en la importancia que adquiere la tecnología, la llamada ciencia de la producción.