Los Movimientos Internacionales de Acción Católica Especializada (Miacs) representan a más de 500 movimientos en todo el mundo con una gran diversidad de países, culturas y orígenes. Desde el comienzo de la pandemia de Covid, han reflexionado juntos sobre esta crisis y desean compartir algunas reflexiones y acciones.
La pandemia agrava brutalmente los problemas preexistentes: el desempleo, las desigualdades de género, las desigualdades entre ricos y pobres dentro y entre países, la violencia doméstica, etc. Las necesidades aumentan y son más visibles: el acceso a la sanidad, la seguridad social, las condiciones de trabajo del personal sanitario, la alimentación, la educación, la acogida de inmigrantes, en un contexto de aumento de la deuda pública.
La pandemia ha hecho insoportables estas situaciones, como demuestran los estudios de la JOCI sobre el impacto de Covid en los jóvenes trabajadores, de la FIMARC en los agricultores y pescadores pobres, y del Midaden en la vida de los niños. Debe cambiar una estructura que no puede resolver estos problemas ni evitar que se agraven.